Impregnada de ese olor perenne
brotan pequeñas rosas
una inmensa cortina recuerdo
el árbol seco se queda
bajan en la sombra de las escaleras
cajas, libros, recuerdos
Entro en la cocina buscando
ese olor, ese sabor
encuentro esa receta añorada
- una salsa, una pasta
las saco del olvido
para sentir el gusto y poder así volver a oler
ese mismo olor de aquella vez
sabores urgentes, sabores inacabados
huele a ti Mamá
Ellos y yo hablamos en ese sillón verde
una rama de parra por retoñar
cosas duermen en la playa
parece que todo termina
y en la nueva casa
las pequeñas rosas...
Filomena Calicchia (Caracas, 1970) jugó poco con muñecas en su infancia. Lo de ella eran las pelotas, los juegos de niños. La fotógrafa, que en noviembre inauguró la exposición Las vidas de Bárbara, empezó a trabajar con Barbies ya entrada en su adultez. Ahora las maneja a su antojo: las pone a dar un discurso, a leer o a cocinar.
La muestra, que se exhibirá hasta el 28 de enero en El Pasillo del Centro de Estudios Fotográficos (ubicado en La Montaña Creativa), reúne 15 imágenes de la muñeca fabricada en Estados Unidos. Es una metáfora del universo femenino. "Quería hacer montajes...
No es la primera vez que ella, siempre igual, siempre joven, siempre rubia, protagoniza una serie fotográfica. Lara Alcántara la sacó de su entorno lúdico y la fotografió en situaciones límite: golpeada, prostituida, minusválida y autoflagelada. Ahora, Filomena Calicchia, ingeniera de sistemas fascinada por el arte de las imágenes congeladas, muestra a la Barbie, ese referente de la infancia de millones de niñas en el mundo, en los papeles tradicionalmente asignados a la mujer.
Las vidas de Bárbara , propuesta que se exhibirá hasta finales de este mes en la galería El Pasillo...